El distrito centro de Madrid es la zona más antigua de la ciudad. Tiene la identificación 1 y está divido en seis barrios: Palacio, Embajadores, Cortes, Justicia, Universidad y Sol. Entre sus principales lugares a visitar destacan la Puerta del Sol, la Plaza de Oriente, la Plaza Mayor y el Arco de Cuchilleros, la Gran Vía, la Plaza de España o de Colón. También se caracteriza por tener edificios de entre cuatro y seis plantas, sin embargo contiene tres de los rascacielos más antiguos de España: el Edificio Telefónica, el edificio España y la Torre de Madrid.
Es una de las zonas con mayor actividad comercial gracias a Preciados. Las calles Fuencarral y Hortaleza contienen asimismo un número importante de pequeños comercios y una gran animación. También es renombrado el mercadillo callejero de El Rastro, que se sitúa los domingos y festivos en torno a la Ribera de Curtidores. En diciembre es tradicional visitar los puestos de la Plaza Mayor, donde se pueden adquirir adornos navideños. Por último, Madrid ofrece la posibilidad de disfrutar de los pocos cafés clásicos que quedan, como el famoso Café Gijón.
Desde el pasado mes de diciembre de 2013, Madrid vuelve a contar con un casino de juego situado en pleno centro de la capital. Concretamente en el eje Prado-Recoletos, se levanta el Casino Gran Madrid-Colón. Ubicado en un edificio vanguardista, el nuevo templo del juego de la ciudad ocupa 4.123 metros cuadrados, repartidos en cuatro plantas decoradas por el arquitecto e interiorista Ignacio García de Vinuesa.
El Casino Gran Madrid ha sido el primero en abrir una sucursal en el centro de la capital, con la inauguración de esta sala que completa su sede de Torrelodones.
En el Casino Gran Madrid-Colón se disfruta de cuatro juegos: Ruleta americana, Black Jack, Punto y Banca y Póker de contrapartida. La sala principal alberga una zona de mesas de juegos y máquinas de azar, entre ellas una que no tiene ningún otro casino de España, inspirada en la película de Batman ‘El caballero oscuro’, y el café bar Bond para tomar un cóctel entre partida y partida. En las maquinas de azar, jugando a partir de 1 céntimo de euro, se pueden conseguir premios de distinta cuantía. En total cuenta con el máximo número de mesas permitidas (27) y con 65 máquinas de azar.
Como novedad, hay una sala de juego privada que también tiene servicio particularizado de bar. En la planta baja, de menor tamaño, también hay un bar cafetería llamado Rhum&Rhum Bar y una sala de juego, y además, en esta planta hay una terraza con un jardín vertical, con 10 especies botánicas distintas, para que los clientes puedan salir a fumar en un bonito ambiente en el que además no pasarán frío, ya que hay estufas a lo largo de esta superficie.
Además, su modernidad se comprueba en el material de juego, que por primera vez en Europa apuesta por su integración total en el espacio, con materiales específicos, creados en exclusiva por la firma John Huxl. El despliegue digital es otra seña característica. Un total de 55 pantallas de televisión –algunas, incluso, de 62’’, que ambientan y dinamizan el microcosmos de azar y ocio creado en el centro de Madrid.
Como es habitual, solo acceden los mayores de 18 años, previa presentación de la documentación original como DNI, permiso de conducir o pasaporte. Para otras nacionalidades también se solicita pasaporte o permiso de residencia español. No se permite el acceso al interior del casino con pantalones cortos, camisetas de tirantes y objetos voluminosos, tales como mochilas o cascos de moto.
El precio de la entrada diaria es de 6 euros, el abono semanal cuesta 30 euros, el mensual 60 y el semestral (seis meses) tiene un coste de 90 euros.
El horario de la zona de máquinas de azar es de de 11.00 a 05.00 horas (jueves, viernes, sábados y vísperas de festivo: hasta las 06.00 horas). En la zona de mesas de juego de 16.00 a 05.00 horas (también los jueves, viernes, sábados y vísperas de festivo, hasta las 06.00 horas). Por su parte, el horario de comidas en el Restaurante Columbus es de 13.30 a 16.30 horas, y las cenas de 20.30 a 02.00.
Precisamente el servicio gastronómico es otro de sus platos fuertes. Con los hermanos Sandoval, la esencia de ‘Coque’ estará siempre presente en Columbus. Las señas de identidad con las que han construido su marca, cocinada a base de recetas familiares, son los ingredientes del terruño y las justas dosis de vanguardia gastronómica.